Tienes un rato

la prensa del bar

durante el desayuno

y en medio del bullicio

ves en ella

una foto de esta guerra infame:

dos iraquies muertos

en una especie de trinchera

y a su lado,

casi inadvertida en el suelo,

una bandera blanca.

Al pie de la foto

nadie

- ni "una fuente autorizada" -

hace mención al trapo atado a un palo

ni que los mataron cuando

evidentemente

se estaban rindiendo

ni que los ingleses que les dispararon

se les fue el santo al cielo

pensando

en la Champion Leage

ni que los muerto eran

jóvenes reclutas hambrientos

o

- tampoco da a entender -

simplemente seres humanos

pobres y con miedo

y doblas el periódico

las diez

y lo dejas en la barra

y ya lo manotea alguien

para ver cómo

dice

quedó el Real Madrid

un trago de agua

o dos

o tres

a cero

y vuelves a la oficina

mañana

más

periódica

y espantosa nutrición.