POEMAS
Sandra Rubio
[ ESA ENCANTADORA FORMA DE DECIR NO ]
ESA encantadora forma de decir NO,
ese verte así, negación en fuga,
extensiva, extrauterina, extremaunciada
con la sonrisa falsa de licántropo fullero
escondiendo algo más que dientes por la boca;
ese resonar, que saboreas y desmayas
fundente en tus labios legamosos fatales
donde levita el olvido, y otras cosas
innombrables…]
esa encantadora forma de decir no,
(hoy no, ya no, sólo no, no, no)
he de confesarlo, me emociona.
TRES DE MAYO
-QUIERO ser este sol de mañana
en la boca del de ayer.
Entonces, el poeta, cayó muerto.
(Y cuentan que nadie supo encontrar
el sentido de sus palabras.)
EL VIOLINISTA VERDE
A Chagall, que me enseñó a soñar.
EL violinista verde loco de placer emborrachado
tiene los ojos oscuros y un secreto en la mirada;
su melodía bala acordes tristes de yegua hebrea
-saltan notas como chinches acróbatas por azoteas-.
Lleva liviana levita violeta abierta en violenta tijera,
y tiernas intenciones-tentaciones de ternero destetado,
su violín velado por las sombras vehementes
hace sangre su gangrena dejándose por los tejados.
Lleva liviana levita violeta abierta en violenta tijera,
el violinista verde loco de placer emborrachado
mira el blanco de las nubes el gris pardo, la montaña,
y el sonido de su pena encementa las pestañas.
Tiene los ojos oscuros y un secreto en la mirada
y tiernas intenciones-tentaciones de ternero destetado
y algo muy raído en la cabaña, de sus entrañas,
que marea]
-saltan notas como chinches acróbatas por azoteas-.
HARAQUIRI
HOY déjame que te llore
lágrimas gruesas
como guijarros,
como gorriones ahorcados
en el herbaje, junto al hierro,
en este cementerio
de halógenas naderías.
Hoy déjame, que voy a echar
diez hectogramos de líquido
hemático, por el envés
para regar, tu espalda baldía;
y colocar el pico
al aire,
como cadáver art-decó.
Hoy, déjame que mate
a los halcones de las palmas
de mis manos,
que deslizan y hacinan haikús,
como desahuciados jaramagos
en las costillas flotantes:
joroba después de la hecatombe.